Pendiente aun.

Sigo juntando jugo, me acaricia el trasero y sonrie...
Que alegron el rescate de los mineros. Esa primera noche nos amanecimos entre dandole y dandole y con el corazon apretado de ansiedad por cada uno de los que iban saliendo.
Ame el valor de los rescatistas, el coraje tranquilo de los mineros y la seriedad de los tecnicos.
Espero que sus respectivas mujeres, mas de una me imagino no solo en un caso, los hagan pedazos al quedar a solas en sus hogares.
Despues de todo estuvieron un par de meses dentro de una mina, sin poder gozarla jijiji. Noo en en serio ahora , espero que la cercania de la muerte en el caso de ellos y el no saber y solo poder esperar en el de ellas, les permita un cambio de manera de enfrentar la vida; nadie la tiene comprada y polvo que postergas puede ser el ultimo placer perdido y nunca mas nada...
A diferencia de mi amo, que me ordena ir a verlo en la mañana y pasa por la tarde por mi depto incansable, aveces me toma sin ni decir agua va, disfruta que no este preparada, algo seca y me duele su penetracion, pero al poquisimo rato me lubrico locamente y comienza el placer. Pero mis grititos o gestos de dolor por su pene le encantan, -no aun no- le suplico, o -asi no, mas lento-, todo para que me penetre hasta el fondo de una sola vez; una y otra vez no aprendo y se me sale la suplica y el por supuesto hace lo contrario de lo que le pido...
No he contado de la maldita varilla de membrillo, tiene un arbol en su casa, me llevo y me hizo elegir una finita y de unos 80 centimetros, tuve que pelarla y pulir sus nudos raspando con una cortaplumas, hasta que quedo suave. _pulele bien los nudos-dijo , - recuerda que cada nudo puede rasgar, la idea es que al azotarte resbale por tu piel y eso yo creo que debe doler su poco.-
Y yo siento un sudor frio ante sus palabras, me aplico a dejar la varilla bien suave, luego me hizo frotarla con aceite y dejarla bien lubricada. La tomo y la hizo sonar en una almohada y emitio un chasquido que me aterrorizo... El me tomo la cara y me comio la boca mirandome a los ojos. Pronto mi ropa salio volando y me puso abrazando una pared y se puso a mi lado obligandome apegarme a ella con las manos en alto y comenzo a rozarme la espalda, y bajando a las nalgas y muslos y pegando suave y repetidamente, de pronto azota en el aire , el agudo sonido me anticipa lo que me hara... Me abraza,esta desnudo y siento su cuerpo pegado a mi y su pene erecto rozando mi trasero y se mueve besando mi nuca y hombros y me susurra, -¿lista para gritar?-.
Muevo la cabeza buscando su boca para besarla, creo que la pregunta era mera retorica, pero se aparta y recibo un feroz azote en las nalgas, como un pellizco agudisimo que me clava de dolor en la pared, y por supuesto grito.
-Te pregunte si estas lista- dice y otro varillazo remarca sus palbra, capto que me he equivocado, o que quiza es un juego si hubiese contestado me habria azotado igual, no alcanzo a pensar cuando llega un tercer golpe aun mas fuerte y mi grito suena: -Si amo,estoy lista-.
-Bien dice- y aplica un azote fortisimo en el aire, que me encoge de miedo, seguido de otro azote que me cruza las nalgas, duele mucho, aparta la varilla para repetir y mi cuerpo se escabulle escapando de la pared...
No dice nada solo me mira...
Vuelvo a pegarme a la pared, se pega a mi espalda y siento su pene punteando mi trasero, mientras mordisquea mi nuca -¿Que castigo merece tu desobediencia esclava?-, pregunta.
No se que pasa por mi cabeza, proyecto hacia atras mi trasero y lo expongo mas a su miembro lo tomo con ambas manos lo acaricio y dirijo hacia el canal entre las nalgas. El amo se revuelve punteandome y continua besando y rozando mi cuello con sus dientes mientras su mano toma un pecho y la otra otra me roza los muslos con la varilla. -Ya llegara la hora de disfrutar de mi propiedad, ahora buscare enseñarte que no puedes eludir un castigo-, dice muy despacio y muy frio, me da mas miedo su voz que lo que dice...
Pronto estoy con las manos atadas y tendida mientras me toca y besa, al poco rato me tiene hirviendo de deseo, pero ya se que lo peor que puedo hacer es pedirle que me tome, es capaz de estar un par de horas acariciandome y jugando con mi cli para detenerse justo antes de llegar a mi placer, se aparta y comienza a azotar los muslos separandome las piernasy acercandose lentamente a la entrepierna. Vuelve a las caricias y nuevo azotes,no muy fuertes pero la piel interior del muslo es muy sensible, cada vez se acerca mas.
¿Que sigue?- , pregunta. Se que sigue,o al menos me imagino perfectamente el pequeño infierno que me tiene preparado, y que por supuesto incluye obligarme a decirlo. Tengo claro que no hay respuestas correctas, diga lo que diga seguira azotando hasta llegar a su objetivo y me hara gritar de verdad. A ratos su lengua y manos se encargan de exitarme mas aun, y hinchar mis genitales, me los imagino tumefactos y preparados para la penetracion y en cambio recibiran el castigo que demora tanto como le place.
-Sigue lo que al amo se le entoje hacer con su esclava- digo en un alarde de viveza, mientras tengo mis piernas bien separadas y mis genitales expuestos a su varilla, el amo sonrie con esa semi sonrisa que ya le conozco, y juega rozando los labios, el cli, los muslos, se arrodilla entre las piernas se tiende y me penetra de una sola vez en la mejor misionera que he tenido. Mi orgasmo llega sorprendentemente rapido, el amo sonrie, y vuelve a juntar presion mientras me sigue penetrando, el maneja el ritmo, estoy atada aun, entra y sale como si estuviesemos hecho para acoplarnos, es una accion perfecta, armoniosa y exquisita.
-´Prefieres mi pene o la varilla- pregunta mil veces sadico, otra pregunta sin respuesta correcta,lo que diga sera usado en mi contra; si digo el pene, lo sacara de una y volvera a la varilla, si digo la varilla, por supuesto "me dara en el gusto"...
-Lo que el amo quiera hacer con su esclava es el placer de su esclava- chamulleo, no en vano he estado pensando en respuestas neutras a su juego de las preguntas.
El amo sonrie con su ya conocida semi sonrisa, y se dedica a gozar de su propiedad montandome vigorosa e intensamente hasta mi nuevo orgasmo seguido casi en seguida por sus gemidos de placer y su cuerpo tenso clavado profundamente en mi interior.
Abrazaditos, con ese rico abrazo de despues de, pregunta. -¿te gusto tu membrillito?