jueves, 28 de octubre de 2010

Matematicas a rebencazos.




Bueno amenazas de, mas bien, por suerte...
Muchos dias sin escribir, los recuerdos se me amontonan y me resulta dificil seleccionarlos. Ademas que no recuerdo algo muy marcado, el amo se ha dedicado a disfrutar del sexo duro y hace uso de sus derechos de castigarme cada vez que se le antoja; ya sea con sexo de por medio, potenciando entonces mi placer con el dolor y las amenzas de aplicarlo, o en frio como digo yo, simplemente me castiga sin connotaciones sexuales, por la mera gana de hacer sentirme su poder o quiza solo para relajarse de las tensiones...
Mi piel castigada cumple el papel del ravotril y me tinca que con ventaja y sin efectos colaterales ;-) Bueno hay un obvio efecto colateral, y es que parece que puede producir adiccion en el amo y en mi y tambien un cierto acostumbramiento en la piel. Asi si el amo podia, al comienzo de nuestro trato, darme un bofeton antes de ordenarme algo sexual, por ejemplo, hoy lo hace pero no es uno sino varios, y puede no asociarlo a una orden sexual, sino a un mero ejercicio de poder, como hacerme pedirle mas, pero no las simples palabras, debo ser "convincente" y las amenazas si no le parezco convincente son muy severas...
Junto con eso cuando el castigo esta asociado al placer sexual, me encanta, asi derechamente: lo disfruto, punto. Pero ademas cuando no hay una asociacion sexual directa, como en el ejemplo de pedirle mas castigo convincentemente, se me produce como una ansiedad, una especie de inquietud, dicho en chileno como un hoyito en la guata, que tambien es muy placentero.
Sin embargo no es todo, ademas hay un acostumbramiento en mi, me he dado cuenta que inconcientemente espero mas intensidad en los castigos y las pruebas que el amo me pone; asi me he pillado un par de veces casi provocandolo con leves, levisimas en realidad, desobediencias, cosas que me han significado inmediatas represalias muy fuertes.
Por ejemplo un dia ordeno, previas palmadas en mi trasero: -chupamelo-, y me demore en hacerlo, entre dando besitos en su bajo vientre, pase sus muslos, miraditas calentonas mientras lamia justo al lado de sus testiculos... Me detuvo de una, me aparto un poco, ordeno que pusiera las manos tras de la espalda y me cruzo la cara con feroz par de cachetadas. Se detuvo a mirarme a los ojos y otro par de golpes aun mas fuertes, vuelve a obligarme a mirarlo y otra vez golpea. Duele, por Dios que duele, lo peor es no saber si eso sera todo o volvera a cachetearme una y
otra vez. Y por supuesto que vuelve a hacerlo, yo ya hace rato lloro a moco tendido, pero me mantengo en mi postura firme arrodillada, con las manos atras y la cara expuesta a sus manos, aunque con una ganas locas de detenerlo...
Finalmente comienza espaciar los golpes, y entre una serie y antes de la siguiente siento que deja tiempo para que me apodere de miembro, me inclino y lo succiono integro, saco mis manos y acaricio sus testiculos y practicamente me devoro su pene, lo lamo largamente y me lo introduzco integro en la boca. El amo suspira de placer, y lentamente va dejandose caer en la cama a su espalda, dejando los pies en el suelo y las piernas abiertas, exponiendo completamente su sexo a mis caricias. El mismo hombre que me acababa de golpear inmisericorde, esta ahora inerme con sus genitales en mi absoluto control y estoy haciendolo gemir de placer, marcando yo el ritmo, la
intensidad, la profundidad, en ese instante el amo me pertenece. Cuando finalmente siento su pene endurecerse aun mas, acelero un poco y aumento la penetracion hasta sentir sus gemidos con que se marcan sus orgasmos.
Recibo su eyaculacion en la boca, como casi siempre que le hago sexo oral, y lo ayudo a terminar masajeando sus testiculos, pasando tambien por el perineo, suavemente voy dejando de succionar y lamer, se que se pone demasiado sensible el glande y poco a poco me voy deteniendo.
Termino tomando su pene y dandole besitos sumisos, muy sumisos, de esclava que ha aprendido su leccion.
El amo me tiende a su lado, me apapacha entre sus brazos, me cubre las piernas con una de las
suyas y reposamos hasta quedarnos dormidos. Despierto quiza un par de horas despues, con un placer intenso, el amo me esta devorando entre las piernas, lame y succiona alternativamente, sus deditos locos me examinan intimamente, finalmente deja el oral y me penetra vigorosamente en la mas tipica postura misionera. Me abrazo a el , disfruto de su boca loca y su pene que entra cuanto quiere y siento como ahora soy yo de nuevo su pertenencia. Mi orgasmo es seguido en pocos momentos por el segundo del amo. Beso y abracitos ricos. Aun siento en la cara el calor de
los golpes del amo.

¿EL titulo de esta entrada? Es solo que uno dia del finde despues de hacer ricamente el amor en la mañana, enun dia feito como para salir a pasea,r el amo dijo:- dedicate a hacer tus ejercicios de matematicas, yo leere un rato y despues bajamos almorzar...-
-Amito, que lata en finde, y tan temprano- trate de alegar.
-¿Recuerdas el rebenque que compre para ti? Lo he usado una sola vez, quiza te ayude a estudiar...- Dijo con su mejor cara de sadico.

No hizo falta, hice todo el apunte de ejercicios para esa semana... Cualquiera entiende con buenas palabras :-)

3 comentarios:

  1. Se te echaba de menos, bienvenida tu nueva entrada y seguro al menos en matematicas te ira bien.

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  2. Excitante como siempre, pero tengo una duda ¿el hecho que te abofetee cuando no estás lista no es estresante?, digo, si lo esperas entiendo que incluso la espera es parte del juego, pero así de buenas a primeras ¿no es una tensión constante y agotadora?.
    Saludos.
    Lucas Sevilla

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  3. Gracias Jorge, sin duda con un buen estimulo se aprende mucho ;-)
    Lucas, el amo se las arregla para que nunca este segura, si sumo las veces que me da una cachetada inesperada, son escasas, pero me mantiene en la certeza que eso solo depende de el y que no sera gentil si le place no serlo, pero sin embargo es basicamente muy gentil. Asi logra que este entregada a lo que sea, pues se que me cuida activamente, pero nunca estoy segura de lo que sigue ni como seguira...
    Ahora mismo estoy esperando para entrar a su oficina, ¿Que hara o me pedira? La verdad ni lo sospecho, solo puedo asumir lo que es mas probable, pero el se especializa en lo improbable.
    Un beso a ambos

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