Esclava compartida

Tanto tiempo sin escribir y tan poco tiempo libre que me queda, casi cero. Felizmente duermo muy bien, no es raro despues del tratamiento casi diario de mi amo, asi puedo estar recuperada dia a dia y soportar la tension creciente de la cada vez mas cercana PSU. Me he sacado la cresta preparandome, siento como algo inminente que mi futuro, hasta hace unos pocos meses muy precario, depende del esfuerzo que haga ahora para quedar en la carrera que pretendo y en la U que quiero.
Ya esa fue mi queja, vamos al relato de hoy. Esta basado en una "propuesta indecente" a mi mail que un lector me propone, y es el ser compartida por mi amo con el amable lector. Le conteste que , al menos en mi opion el amo no aceptaria nada semejante y tengo un par de experiencias que me lo sugieren. Eso al menos hasta hoy, pues con el amo no se puede predecir nada, nunca.
Detodas maneras el tien axceso al blog y al mail, asi que no hay secretos.
Hace una semana o algo el amo llega un viernes cualquiera y me ordena.- vistete linda y calentadora, vamos a una fiesta swinger- Ufff traspire frio, sere una pendex boluda pero se que eso es intercambio de parejas y no se si estoy dispuesta a ser compartida. Que el amo se encame con otra, con condon, es su derecho. No es mi derecho ni sin condon ni con, yo le pertenezco durante este tiempo en exclusiva, pero asi como le pertenezco el puede ordenarme meterme con otro... Al margen que la idea me horrorice.
No quiero que me entiendan mal, no me horroriza tener sexo consentido con quien yo quiera, de hecho me he licitado y no solo sexualmente le pertenezco a mi amo, sino que muchisimo mas intimamente, pero es distinto decidir tener sexo con alguien a que te ordenen tenerlo con cualquiera que te señalen...
Tampoco sabia si era capaz de oponerme a la orden de mi amo, o si tendria que mandar todo al tacho y usar mi palabra de seguridad.
Bueno, al final vamos, yo de mini, polerita exhibicionista, collar ciñendo apretadamente el cuello con una hebilla para instalar la respectiva correa de perrito. Llegamos a la casa en un barrio de casonas en Ñuñoa y entramos y horror senti la oleada de calentura que nos recibio,yo era al menos 10 o 15 años menor que la menor de las mujeres. Casi todos los hombres entre los 35 a 45, las mujeres abundaban las cercanas a los 35 a 40, varias se veian atractivas pero nada que comparar, al menos visualmente con una pendex y semi vestida para peor.
Me sentia como una vaquilla en una exposicion, con los postores observando mis "detalles" y prontos a hacerle ofertas "irresistibles" al amo.
Muy luego este fue abordado por varios caballeros que le presentaban a sus parejas, mientras me echaban miradas de calientes, el amo me presentaba y me paseaba por entre los grupos, donde eramos recibidos con grandes muestras de interes. Era obvio que le ofrecian sus parejas descaradamente a cambio de mi...
Se hacian varios juego eroticones, para romper el hielo segun el maestro de cermonias, y pronto algunas parejas comenzaron a bailar y poncear su poco y luego desparecieron un par por ahi. Mientras el amo bailaba conmigo, e intercambio pareja de baile con un par de tipos, como cotizando las ofertas y me miraba con sus ojos de picaro sadico, el sabia positivamente que me estaba cociendo en mi propio jugo, aterrada que me entregara a alguna de mis parejas de baile. Todos muy educados debo decir, eso si muy insinuantes, lo que es obvio, todos adultos y sabiamos a que ibamos, solo que yo estaba que me orinaba de miedo a que el amo eligiera uno de los tipos y me entregara a el, o a mas de uno...
AL rato el amo recupera su lugar conmigo y me toma y me abrazo a el como a un salvavidas y a mi pesar estoy tiritando y helada. El me da besitos suaves y sonrie malvado -¿Cual prefieres?, me interesa la de verde, es la pareja de ese gordito y me hara lo que quiera a cambio.- me entierro en su pecho, tengo los ojos llorosos, ahora se que aceptare lo que el ordene, incluso el horror de hacer un cuarteto con el gordito y la de verde.
-Lo que ordene el amo estara bien- le digo con un gimoteo. Maldicion estoy hipando en su hombro, y la voz me sale con un suspiro que se me atraganta. Me siento muy niña inexperta metida en cosas de gente grande y vivida, y absolutamente superada por la situacion, no quiero, pero no soy capaz de enfrentarme al amo con mi negativa, pero me duele peor que su cinturon en su mas duro castigo.
El amo me besa profundamente, ahi se que me entregara por hacerle cosas a la de verde,... -estas temblando niña, vamos- dice, y se despide de los anfitriones y ¡¡¡me saca de ahi!!!
En su auto me destapo llorando primero, y despues a ratos me dan ataques de risa con llanto, es muy raro, pero asi fue. -Te lo creiste flaca- dice risueño. Maldicion jugo conmigo como con una muñeca, ahi ya la risa nerviosa fue predominando y luego mi mano fue hacia su entrepierna y amaso firmemente su pene que se erecta rapidamente, -quiero comerme al amo -le digo, con voz fuerte y clara, y siento como se endurece aun mas y me mira con su conocida mirada de exitacion, -vamos al Valdivia- dice el amo y esta esclava le dio a su amito todo el merecido placer que se merece un perverso jugueton como el, pero que me cuida al mismo tiempo...
La segunda experiencia fue en una avenida Las Condes, ibamos a su casa despues de un carrete poco, yo como siempre faldita corta a su gusto, el con su mano en mi muslo, muy arriba, le encanta como miran en las luces rojas.
De pronto saco un condon. -Para que el forrito amo-, pregunto, pensando en que le daria ganas de tomarme sin llegar al orgasmo, como de vez en cuando hace.
-Es para el tipo que llevaremos, a cualquiera que haga dedo, chicoco, feo, flacuchento o flaite, si ahce dedo te voy a entregar ael para ue te tome en el asiento trasero mientras yo miro-, dijo con su acostumbrada voz asertiva como relatando un hecho cierto y evidente.
Lo senti como si me tiraran un balde de agua helada en la cabeza y me corriera porla espalda, ya habia visto tipos haciendo dedo a esa altura de la avenida, y vi con horror que en la esquina seguiente habia uno, pues no era paradero.
El amo paso despacio, casi se detuvo, yo sentia el corazon latiendo a full, eltipo miro con esperanza que lo llevaran, pero el amo acelero suavemente, coo arrepintiendose de seguir de largo.
Repitio el juego tres veces mas y en todas se me detenia la respiracion, incluso un tipo hizo un gesto como para acercarse, pero el amo siguio. Yo ya respiraba aliviada, era otro juego del amo.
De pronto se detiene frente a otro tipo y lo hace un gesto de subir atras y el tipo sube y da las gracias, que va cerca de la plaza de San Enrique...y yo enterrada en el asiento veo que el amo me mira con su cara mas perversa, y tiene a su lado el condon... Y me lo pasa visiblemente.
Pronto lleva la conversacion a donde quiere, que que edad tiene, a que se dedica, es trabajador en una construccion, si es casado o emparejado, y el tipo ingeniuamente sigue la conversacion. El amo acaricia mi muslo mientras habla, como el dueño que es, mienras yo muero de ansiedad y miedo, se que le planteara al tipo su oferta y que se las arreglara para que acepte, y me hara pasarme al asiento trasero.
Mi unica esperanza es que el tipo rechace la oferta por miedo a alguna trampa o algo asi, peor el amo puede ser diabolico si se lo propone, parece leer mi mente y le cuenta al pasajero que ha hecho una apuesta conmigo que soy su pareja y he perdido y tengo que pagarla aunque no quiero pero el sabe que lo hara pues el me conoce como muy orgullosa de ser cumplidora, aunque me cueste. -¿Usted cree que hay que pagar siempre las apuestas si o si?- le pregunta, -por supuesto contesta- el favorecido por el "regalito". Estoy frita, ya se que aceptara sin miramientos, ademas me echo una ojeada a mis piernas cuando se acerco a la ventana. Estoy traspirando, le pido que aumente el climatizador del auto, el se rie y pregunta.
¿Estas muy acalarada esta noche?, eso tiene facil solucion... y palmotea mis piernas suavemente.
Maldicion ya me veia tomada por el intruso en algun callejon de Arrayan...
De pronto el amo se detiene, estamos cerca de la plaza, -aca lo dejamos amigo, viramos por ahi- le dice el amo y el hombre da las gracias por el acarreo y se baja... y yo respiro...
Era otro juego. Tomo su mano y la saco de mi pierna, con ganas de morderlo.
Entonces sonrie y pasa lentamente frente a alguien que espera su bus y vuelve el sudor frio a recorrerme...
-Vamos a la casa- dice finalmente y me acomodo en el asiento, - no pienso compartirte lesita-
-No por ahora- agrega maldadoso